El calor extremo y las olas de calor nos pueden afectar a todos. Incluso las temperaturas ligeramente por encima de la media pueden dañar a las personas.
Los bebés, las personas mayores y las que tienen problemas de salud crónicos graves corren mayor riesgo a causa del calor. Averigua qué hacer antes, durante y después del calor extremo y las olas de calor.
Cuando hace calor es mejor quedarse dentro. Hay muchas maneras de preparar tu casa para el calor extremo:
Planifica con tu familia o whānau cómo protegerse del calor extremo. Todos deberían saber qué hacer en casa, en la escuela, en el trabajo o en la comunidad. Algunos lugares no tienen aire acondicionado y no son seguros durante el calor extremo.
La mejor manera de protegerte contra la radiación ultravioleta de la luz solar es ponerte ropa que te cubra, protector solar, sombrero y gafas de sol, y colocarte a la sombra.
En Nueva Zelanda, el Servicio Meteorológico (MetService) emite alertas en caso de calor extremo. Mantente informado de las últimas previsiones de temperatura y alertas de MetService.
Haz un plan en línea con tu whānau para salir adelante en una emergencia. Piensa en las cosas que necesitas todos los días y en qué harías si no las tuvieras.
La luz solar de Nueva Zelanda puede tener un nivel elevado de radiación ultravioleta (UV), que puede dañar la piel y los ojos.
Puedes protegerte a ti mismo y a tus hijos aplicando las medidas que indica SunSmart. En el sitio web de SunSmart encontrarás información sobre cómo protegerte sin renunciar al sol.
Cuando haga calor, quédate dentro o a la sombra, limita la actividad física y bebe agua.
Hay cosas que puedes hacer para mantenerte fresco en casa:
Si no logras que tu casa esté fresca, ve a un lugar público que tenga aire acondicionado, como una biblioteca o un centro comercial.
Presta atención a los signos de la exposición al calor:
Busca atención médica inmediata si observas signos de insolación. St John ofrece información sobre cómo detectar y tratar los trastornos relacionados con el calor.
Comprueba cómo están tus vecinos y cualquier persona que pueda necesitar ayuda.
Mantente informado durante los períodos de calor extremo. Escucha la radio o sigue a tu Grupo de Gestión de Emergencias de Defensa Civil en línea. Sigue las instrucciones de los servicios de defensa civil y emergencia.
Las mascotas y demás animales son vulnerables al calor extremo. Los que corren más riesgo son los animales muy jóvenes y los más viejos, así como los que tienen el hocico corto.
La mayoría de los animales no sudan, sino que para refrescarse jadean, se mojan, toman agua y buscan sombra y tierra fresca. Los animales no pueden explicar lo que necesitan, así que depende de ti extremar los cuidados durante el calor extremo:
El Ministerio de Industrias Primarias (MPI) tiene consejos para preparar un plan para tus animales. Incluye listas de verificación para diferentes tipos de animales y diferentes emergencias. Revisa las listas de verificación para elaborar tu plan.
Encuentra a tu grupo local de Gestión de Emergencias de Defensa Civil (CDEM).
El calor extremo puede ser grave y poner en peligro la vida.
St John ofrece información de primeros auxilios sobre cómo detectar y tratar los trastornos relacionados con el calor.
El calor extremo puede provocar enfermedades y la muerte. Pero la planificación y las medidas eficaces pueden reducir sus efectos en la salud.
En el sitio web de Health New Zealand encontrarás información sobre los efectos del calor elevado en la salud y sobre cómo tratarlos.
Trabajar en condiciones de calor extremo puede ser peligroso.
En el sitio web de WorkSafe encontrarás más información sobre cómo trabajar sin peligro en temperaturas extremas.
En Nueva Zelanda tenemos muchos peligros naturales. Averigua qué hacer antes, durante y después de cada tipo de emergencia.